domingo, 25 de mayo de 2014

Nicole Faveron

Y rostro de biscuit. “No me entero de que soy bella, pero estoy segura de que me deseas”, parece decir. A sus 23 años, Nicole es una de las cartas peruanas más valiosas en el modelaje internacional. Luego de cerrar un magnífico 2011, nadie queda indiferente ante su éxito, su impactante sencillez y esa traviesa perfección que la hacen una  Auténtica muñeca.


Cuando era chica, Nicole quería ser bombera. Apagar incendios, rescatar heridos y atender emergencias de todo tipo. La vocación de servicio siempre por delante. Pero era corta de vista y, aunque eso no fuera un impedimento del todo determinante, su madre la convenció de que no la aceptarían, por lo que la idea no tardó mucho en desaparecer de sus sueños de niña. Tiempo después vino el modelaje y, con él, la vida repartida entre estudios fotográficos, bastidores y pasarelas. En paralelo, encontró una forma de satisfacer esas motivaciones trascendentes que considera tan importantes: comenzó a estudiar psicología, carrera en la que actualmente cursa el séptimo ciclo y que la ha llevado a disfrutar de los libros del extremadamente lúcido filósofo austriaco Ludwig Wittgenstein. “Al inicio me costaba mucho entenderlo, pero ahora me encanta. El hecho de refutarse a sí mismo es muy valorable


Para Nicole, la mirada de un hombre es muy importante. Quien aspire a salir con ella debe desbordar seguridad, ser un buen conversador y, si la cosa da para más, involucrarse en la relación. “Siempre trato de tener la iniciativa en la relación de pareja. Lo ideal sería un equilibrio y que las dos personas trabajen por fortalecer la relación”, señala con curiosa solvencia a sus 23 años. Como en la mayoría de los casos, la inteligencia y el buen humor son parte del cóctel de cualidades que todo hombre debería tener para llamar la atención de nuestra Símbolo. Para más detalles, un guiño inevitable a uno de sus cineastas favoritos, el genial Woody Allen, de quien prefiere Zelig (una película —cómo no— de divanes y psicoanalistas).


Como modelo, Nicole no deja de viajar. Recientemente estuvo en Turquía, gracias al título de Miss Globe International que ganó el año pasado dentro del certamen Miss Perú. Pero uno de sus mejores logros lo alcanzó cuatro años atrás, en el 2007, cuando viajó a Nueva York para un concurso internacional. De allí salió con un importante contrato y hasta llegó a ser imagen de la firma norteamericana Maybeline. Solo con una vida así de agitada, se entiende que Nicole prefiera pasar sus ratos libres en casa. “Muchas personas me consideran recontratranqui, pero es solo porque a veces no me queda tiempo ni para respirar”, aclara, luego de contarnos que en su última visita a Tarapoto fue la primera en subirse a una moto para recorrer la carretera a Yurimaguas en contacto total con la naturaleza.


La selva no es ajena para nuestra Símbolo. A pesar de haber nacido en Lima, es loretana de corazón, ya que vivió durante buen tiempo en Iquitos. De hecho, fue su representante en la última edición de Miss Perú, donde también consiguió la corona de Miss Turismo. El resto es historia, pero estas fotos para SoHo son un presente.


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Nicole Faveron

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